Ficha Reiko Koizumi

Nombre: Reiko Koizumi
Edad: Desconocida (Aparenta de 15 a 17)
Sexo: Femenino
Preferencias sexuales: Heterosexual
Raza: Demonio mayor (Tipo Oni)
Ocupación/Profesión: Okasan (De Yoshiwara)
Habilidades:
1- Su velocidad parece legendaria aun para los mismos demonios. Supera la velocidad del sonido hasta cierto punto.
2- La mayoría de sus habilidades explotan por su temperamento, y una de ellas es crear tormentas o lluvias un tanto violentas. No es algo que controle, a veces incluso no lo percibe.
3- Puede cambiar la temperatura de su piel debido a su humor, y es algo que ha logrado manejar a voluntad la mayor parte del tiempo. Estando enojada o excitada ella puede calentar su piel hasta quemar un papel con solo tocarle, o en caso de aburrición e indiferencia, adquirir una temperatura muy baja y gélida.
4- Su habilidad favorita sobre todas es convertir sus dedos en garras, haciendo sus manos más bien emplumadas, esto debido a que se parece más a una forma demoníaca y menos humana.
5-
Debilidades:
1- Al igual que cualquier demonio, los objetos benditos y religiosos la repelen y le hacen daño. Algo que en especial le lastima es el agua bendita, pues con ella sus heridas tardan más en regenerarse.
2- Los exorcismos en especial son un terror para ella, pues antes un obispo la había sellado y no había podido liberarse sin ayuda.
3- La sangre de los ángeles actúa como el mayor veneno para su cuerpo, bebiéndolo o mezclándolo con su sangre, con esto necesitaría ingerir bastante energía de un humano o demonio para no morir.
4- Tiene gran debilidad por la belleza masculina, pues aunque comparte bastante tiempo con hermosas mujeres y las aprecia, es fácil manipularla mediante la seducción masculina. Aunque esta debe ser bastante convincente.
5-
Descripción física: Ya sea para su edad real o aparente, Reiko no es para nada alta, mide aproximadamente 1.58 cm pero las getas en sus pies la hacen parecer un poco más alta. Su rostro es casi infantil y siempre está sonriendo, su piel de porcelana blanca la hace parecer una niña delicada y hermosa; sin embargo para los esclavos e incluso algunos clientes, ella tiene una expresión aterradora e intimidante, pues la sonrisa tierna que algunos ven no es nada más que una forma sádica de demostrar autoridad. Sus ojos parecen varias del verde y el azul, su cabello es totalmente negro y largo. Viste siempre kimonos elegantes y muy largos, pero en ocasiones puede vestir de manera occidental.
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Descripción Psicológica: Su manera de actuar con todos sus clientes y las personas en general es bastante educada, misteriosa y halagadora, muestra siempre una sonrisa pues considera que es lo esencial para cualquier negocio. Sin embargo, frente a los esclavos es frívola y sobre todo cruel, en especial con los ángeles. No conoce nada del ámbito emocional debido a que su vida siempre fueron los negocios, sin embargo opina que no hay tal cosa como “amor”, si bien se siente algo intrigada pues es algo que no conoce.
Debido a que en varias ocasiones estuvo muy cerca de la muerte, se prometió a si misma disfrutar al máximo de la vida, de modo que busca los placeres más exquisitos sin remordimiento alguno, sexuales, gastronómicos y artísticos. Respeta a los demonios de su mismo rango, al igual que a los matusalenes.
Historia: Reiko nació en el mundo humano a diferencia de la mayoría de los demonios. Sus padres fueron el mayor misterio de su vida, pues lo más que recuerda de su infancia es el espeso olor del incienso. A nadie habría dicho más adelante que toda su infancia fue una nube oscura y nublosa, con unos sentidos poco desarrollados y la mente casi apagada. Calcula que a sus doscientos años salió de su letargo y consiguió sobrevivir asesinado a cualquier criatura viviente que encontrara (mayormente animales, pero a veces conseguía jóvenes campesinas).
Comenzó a llevar un registro de su vida cuando las primeras culturas estaban en todo su esplendor. Japón sufrió su sed de sangre y muerte cuando ella descubrió sus habilidades. Sin embargo, fue inteligente desde joven, y con poco conocimiento del mundo y su maquinaria fue convirtiéndose en una mujer de negocios. En su edad adulta ella tenía unas proporciones envidiables, piernas largas y un hermoso color de piel, pero nunca necesitó de sus encantos femeninos para conseguir algo, por lo cual su cuerpo es algo bastante restringido para cualquiera.
A principios del siglo XVIII había emprendido un comercio internacional de esclavos africanos por toda Asia, pero poco tiempo duró el negocio debido a que en un viaje a Roma un obispo la exorcizó y la selló por casi un siglo. Ella habría permanecido encarcelada en el Averno sufriendo castigos constantes por demonios inferiores que utilizaban su sangre, su cuerpo y sus emociones. Ya entrado el siglo XIX fue liberada por un Ángel que había perdido sus alas. Él ángel tenía forma de mujer y parecía envidiar su cuerpo de ninfa.
Reiko apenas conocía a los ángeles, pues ellos siempre se mantenían al margen de sus actos sangrientos debido a su letalidad. Aun así, entendía el poder que tenía este ángel, y tras hacer un trato con él, vendió sus atributos de manera que pudiera seguir viviendo en la tierra y el infierno.
Su figura se convirtió en el de casi una niña, aun si aquel contenedor no podía esconder su verdadera naturaleza sádica y cruel. Ella mantenía firmes deseos de poder, pues estos le proporcionaban placer. Así también adquirió un odio y rencor especial por los ángeles.
Gustos: Nada le agrada más que ser atendida por su esclavo y molestarle, ya que es su faceta más juvenil y bromista.
Añora el incienso cuando está sola y el té verde, aunque no suele comentarlo a nadie.
Le encanta ser invitada a Tokio, pues le parece aburrido siempre estar en Kyoto.
Disgustos: Cualquier ángel para ella es molesto, aunque tolera a los ángeles caídos debido a que el poder de estos no está limitado como el de los otros.
Que cualquiera le levante la voz, aunque esto varía bastante en cuanto a la persona (pues le agrada la seguridad y confianza en otras razas poderosas).
Que cualquiera le considere débil.
Otros datos: No posee ningún sentimiento especial por nadie, pero respeta a los de su nivel. Algo curioso de ella es que le agrada pasar tiempo con su esclavo personal.